La cintura del gaucho
En su cintura, el gaucho llevaba ajustado a la bombacha de campo un cinturón ancho de cuero adornado con monedas llamado rastra, nombre que se le dio debido a que su forma recuerda a la del arado. La rastra solía llevar las iniciales de su dueño o la marca del estanciero, como así también el cincelado de una flor, caballo u otro motivo criollo. Pueden encontrarse en Aikèn hechas en cuero liso y cuero con pelo.
Hoy en día, también se usan sobre el cinturón del gaucho cierres de dos botones, con o sin chapa central, llamados yuntas, junto a las hebillas. Ambas pueden adquirirse en peltre, plata o alpaca bañada en plata.
Además, Aikèn cuenta con cinturones realizados en cuero vacuno y carpincho bordado (hechos a mano) y en cuero crudo sobado y salado, provenientes de Salta.
Completan la “cintura del gaucho” los tradicionales cuentaganados de tiento (con diez cuentas, asociadas a las diez cabezas de ganado que contabilizaba el hombre de campo) y los llaveros, que vienen hechos en suela con tiento trenzado, en plata, y en alpaca con tira de cuero crudo o guardapampa.